Luis Carlos Campos, periodista, consultor financiero internacional y experto en el cambio de clima, defiende una teoría totalmente distinta a la del calentamiento, igualmente avalada por los científicos más relevantes del mundo y sin embargo mucho menos conocida por la sociedad. Se trata del enfriamiento glacial.
La editorial Almuzara publicó hace unos años un ensayo científico de este autor, titulado ‘Calor Glacial’, que ya vaticinaba la ola de frío actual, y que habla sobre una nueva Era Glacial. En este trabajo, Campos se refiere a la «religión del calentamiento global» como una «estafa», a partir de la cual han inventado el concepto de ‘sostenibilidad’, para fomentar un nuevo negocio multimillonario, el de las energías renovables.
En su libro, el experto incluye la aportación de muchos científicos que sustentan esta tesis, según la cual, la emisión de CO2 no es la responsable del calentamiento, ni supone una amenaza. Investigadores del Intergovernmental Panel on Climate Change (IPCC) como David Evans, quien diseña el software para medir el CO2 en el mundo, reconocen que la emisión de dióxido de carbono disminuye desde 1958. Además, según fuentes de la NASA, entre las décadas de los 40 y los 70 el CO2 subió y, sin embargo, las temperaturas bajaron.
En este ensayo el autor cita al Premio Nobel de Física, Robert B. Laughlin, quien denuncia públicamente que el miedo por la emisión de CO2 es infundado, y se ha convertido en un mercado que mueve millones bajo la cortina de humo de la sostenibilidad. Luis Carlos Campo cita a Maurice Strong, al que define como amo de la ONU y uno de los grandes controladores del mundo en la sombre, como uno de los máximos especuladores y responsables de «esta mentira».
Hacia la mini Era Glacial
En este sentido, el autor del libro, apoyado por innumerables científicos y organizaciones, defiende que la Tierra se empezó a enfriar en 2007 y 2008, un total de 0.7º C, más de lo que se calentó en dos siglos (0.6º C). Así, el Dr. Khabibullo Abdusamatov, director de Astronomía (estudio de las variaciones del Sol) de la Estación Espacio Temporal (en la que participa la NASA) confirma esta hipótesis y destaca que «en 6 ó 9 años asistiremos al inicio de una mini Era Glacial».
Estos y otros investigadores solares relacionan el enfriamiento con la actividad cíclica del Sol, y defienden que hacia el 2030 llegaremos al ‘Mínimo Gleissberg’, fenómeno que consiste en una rápida declinación de la actividad solar con el consecuente descenso de las temperaturas.
Científicos como Víctor Bokov, el único del mundo que predijo el tsunami del Índico, aseguran que «se avecina una Era Glacial. Sin embargo, la extensión de la Tierra y el aumento de la temperatura de la corteza podrían suavizar sus efectos». Este experto relaciona los ciclos solares con la actividad sísmica del planeta y con el clima, y es que la gran estrella controla la presión atmosférica y ejerce una gran influencia en la Tierra mediante la creación de campos magnéticos.
De esta manera, el Sol sería el gran responsable de las condiciones climáticas que se dan sobre la corteza terrestre y que permiten la vida. Los físicos solares predicen que el astro rey está llegando a un nuevo ciclo, el 24, en el que poco a poco la fuerza de sus rayos irá disminuyendo dando paso a una nueva era glacial. Llegados a este punto, el dilema que tiene que preocuparnos es uno: ¿Debemos prepararnos para el calentamiento, o para el enfriamiento?
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