Nuestra religion

"...Sabemos, según Heródoto, que la vida es un combate y que la paz no es más que la muerte. Nuestra religión se tiene primero como un culto a los héroes, a los guerreros y a los atletas. Nosotros celebramos, desde los griegos, a los hombres diferentes y desiguales. Nuestro mundo es el del combate y de la elección, no el de la igualdad. El universo no es el fin, sino un orden. La naturaleza diversifica, separa, jerarquiza. El individuo, libre y voluntario se convierte en el centro del mundo. Su más gran virtud es el orgullo – pecado supremo para la religión extranjera. En nuestra concepción trágica de la vida, la lucha pasa a ser la ley suprema. Un hombre verdadero es aquel que acomete empresas desmesuradas. Una misma línea de cumbres une a Prometeo y a Siegfried." (Thule, el sol reencontrado de los Hyperboreos- Jean Mabire)